Datos personales

Mi foto
Valencia, Spain
CONVERSANDO: para intercambiar ideas, opiniones, música, cuentos; estar con amigos. Podemos hacerlo en castellano, portugués y valenciano. Espero te encuentres cómod@.

miércoles, 28 de marzo de 2012

LOS JUEVES LITERARIO ... Esta semana, LAS FIESTAS DE MI PUEBLO.







Se oye una gran explosión, y luego otras muchas, como la voz del eco corriendo por un desfiladero. Huele a pólvora, y una nube de humo sube en espiral...
Cierra los ojos...
Está agazapado detrás de un muro semi-derruído. Nota como el suelo tiembla a sus pies; tiene mucho miedo... Nota como las lágrimas mezcladas con sudor corren por sus mejillas, hasta dejar un sabor salado y ácido en sus labios resecos.
No sabe qué hace allí. Por qué está participando en esa guerra que no es la suya.
Dicen que parte del Ejército, capitaneado por un tal Franco, se ha sublevado para derrocar al Presidente Azaña. Y a él, ¡ eso qué le importa! Le importa que llueva para que sus campos den cosecha y los animales tengan pasto..., que sus padres, que se hacen mayores, dejen de trabajar tanto y puedan descansar. Que sus hermanos estén bien y tengan trabajo. Poder casarse con Amalia y formar una familia...
Pero han decido que luche en el bando de "los rojos", que para eso es y vive en Valencia...

Y cuando vuelve al pueblo, lo encuentra desolado. Los campos abandonados, muchas casas derribadas, el olor a quemado, por todas partes, se mete en las entrañas y en la piel.
Muerte, rabia, desolación y pobreza; decide marcharse...
Se irá a Argentina en busca de trabajo y paz. Muchos ya le llevan ventaja, marcharon a países de la otra orilla del charco.
Cincuenta años...
Cincuenta años oyendo a Juanito Valderrama cantar "El Emigrante" mientras, junto a sus amigos españoles, prepara las viandas de Nochebuena, entre la sonrisa burlona de los más pequeños que no entienden el porqué de las lágrimas, ni a qué canta ese señor que hace gorgoritos...
Cincuenta años agradecidos a la tierra en dónde está, que le ha permitido vivir, trabajar y criar a su familia, pero añorando a sus seres queridos, los que quedan, que muchos han muerto ya.
Cincuenta años, repitiendo lo que dice la copla "No permitas Señor, que muera en tierra extraña"...

Abre los ojos. El gentío es inmenso, está delante de la puerta principal del Edificio de Telefónica. en la Plaza del Ayuntamiento de Valencia. El suelo y los cristales tiemblan a cada explosión... El olor a pólvora... El sonido, el color y el olor a casa...
Olor a Fallas, olor a Mascletá...
—Gracias Señor, ya estoy en casa. En Casa y en Fiestas...



¡Queréis ver y estar en otras fiestas? pues vente al blog de MANU

31 comentarios:

Ana Tapadas dijo...

Olá Maru!

bravo relato!

Beijo

MARU dijo...

Olá Aninha, muito obrigado, querida amiba. Beijinhos.

Neogeminis Mónica Frau dijo...

Muy emocionante debe ser para quien tuvo que emigrar, retornar a su casa y con fiesta!...es bueno el sabor del festejo cuando el esfuerzo de una vida ha sido fructífero.

un abrazo.

Wendy dijo...

Hola maru:
Siempre me ha intrigado asistir a una falla. Chances no he renido muchos, pero con tu relato, me he sentido un poco mas cerca... Gracias por ello
Wendy

Medea dijo...

Mi dulce Maru , te leo y comento desde el teléfono , otra vez sin conecsion wifi.Estan instalando en la zona la fibra para los 100 megas y día sí, día tambien se cae la red.
Siempre encantada de leerte maga las palabras.a
Angustioso recuerdo del estruendo de una guerra como todas sin sentido cuando uno sólo quiere trabajar para tapar las hambrientas bocas de los suyos.Por suerte termina la pesadilla al abrir los ojos la mascletá, las fiestas en su tierra, en su casa, esa pesadilla terminó hace ya tiempo.
Precioso y emotivo tu relato. un beso grande preciosa .

Juji Mogar dijo...

Carai Maru, ¡qué gozada de historia! Te voy a seguir, pa' no perderte ojo :)
Un fuerte abrazo.

CARMEN ANDÚJAR dijo...

¡Qué bonito!, triste; pero con un final feliz que es lo que importa, y en las fallas que debe ser lo más.
Un día me gustaría ir en estas fechas.
Un abrazo

Anónimo dijo...

joderse con la agüela...ha sido venir con su compu nueva y hala...hala que hala y olé por el texto que nos ha dejado...casi mejor, agüela, que se te vuelva a romper la compu, si ese es el motivo de que yo haya leído esta preciosidad de texto...
que se rompa la compu a la agüela¡¡¡¡¡, así grita el gentío...y vuelve a gritarrrr..
me gustan los textos originales. me gustan los textos, digamos, salidos de madre,pero que tienen que ver con la temática. me gusta este texto, HE DICHO, AGÜELA...
medio beso.

Primavera dijo...

Eso es lo que les gusta a las personas que vuelven a sus origines sentir de nuevo la fiesta que sigue siendo igual...
Muy bonito tu relato hasta oida los el ruido de los fuegos artificiales que por cierto me dan mucho miedooooooooooo..
Besitos

Cristina Piñar dijo...

Queda muy bien retratado lo que puede llegar a sentir un emigrante que regresa a su lugar de origen para vivir las fiestas. La añoranza de la tierra es algo que nunca se pierde, o al menos, creo que así debería de ser. Por cierto, y aunque no viene a cuento... ¡que ganas tengo de ir a las fallas de Valencia alguna vez! Un beso.

Anónimo dijo...

Qué diferentes son unas tracas de otras, unas fruto de la sinrazón y la barbarie, otras fruto de las ganas de fiesta y diversión. Unas lo alejan de sus raices, otras festivas y falleras, se le cuelan en el alma porque las siente suyas, intensamente suyas, añoradas durante muchos años y al final, hechas gozosa realidad.
Me ha encantado tu relato, Maru.
Un abrazo.

Un par de neuronas... dijo...

Algo así me pasó cuando volví de Atenas y bajé en la estación de Castellón, era tiempo de azahar... y me emocioné sin quererlo.

Un besito.

Manuel dijo...

las fiestas del pueblo como conexion con los origenes y con el sentimiento de pertenecer a una comunidad.
Que frecuente ha sido esa sensacion.
Un beso

rodolfo dijo...

el amor a los petardos y el fuego va en el ADN de los valencianos.

San dijo...

Sin palabras Maru, esa primera parte de poner la piel de gallina, muchos seres queridos salieron fuera en busca de una vida mejor, unos la encontraron otros,,,, al final en casa. La primera vez que vivi una mascletá fue indescriptible lo que experimenté, hay que vivirlo. Luego la noche del fuego una gozada mires donde mires no hay un cachito de cielo que no este dibujado de colores..
Me ha encantado recordar.
Un abrazo.

José Vte. dijo...

Maru, te ha quedado magnífico. Esos recuerdos de emigrante, esas bombas de una guerra dificil y cruel y ese regreso a otras bombas, ahora festivas. Las fallas son grandes en muchos sentidos de la palabra y ruidosas, pero también entrañables para quien las tiene lejos.

Yo como ya hice una entrada sobre las fallas hace unos días, no he querido repetir, jejeje.

Un abrazo

flori zubiaga dijo...

Fantástico relato Maru!
Reflejo amargo de verse luchando en una guerra que casi nunca es la uno, y reflejo agridulce del emigrante que por siempre tiene el corazón dividido entre la tierra de su juventud y la que ahora le acoge y es el hogar de sus hijos.
Puedo imaginar con tu relato, sus lagrimas llenas de emoción nada mas pisar tierra y con las primeras tracas y ese olor a pólvora que le devolverá a sus recuerdos.
Un beso Maru.
Flori.

Atalanta dijo...

Pues si Maru, esta es la historia de la mitad de nuestra España, y ni un paso atrás.

Las Fallas no las conozco, pero seguro que os ponéis las botas, con los buenos productos de la tierra y de la albufera ¡CLARO¡

Un tópico: ¿ No os da pena quemar los ninot?

Besos feriantes

teresa dijo...

Maru, yo soy de las que he tenido la suerte de no tener que salir fuera de mi tierra e incluso todos estamos unidos a ella pero comprendo lo que se tiene que sentir y sobre todo al leer tu maravilloso relato donde se refleja todo el sentimiento.
Que disfrutes y te sientas feliz en estos dias.
Un fuerte abrazo.

rosa_desastre dijo...

Que diferente el olor de la polvora cuando los separan tantos años y tantas visicitudes. Asi el recuerdo nos hace temblar del mismo modo que la emocion del regreso.
Un beso

Alfredo dijo...

Recuerdo la de Valderrama y aquella otra de Antonio Molina del Pescador de coplas. "Adiós mi España querida"
Hay cosas que no cambian, ni los sentimientos, ni las mascletás.

Parece inenarrable, después de un exilio, la emoción del reencuentro con nuestros orígenes, pero lo has dejado perfectamente definido en un relato sentido y emocionante.

Besos

Sindel Avefénix dijo...

Maru me hiciste emocionar con cada línea de este relato. Debe ser tremendo estar en una situación así, sin haberlo elegido.
Como siempre querida amiga, impecable!!!
Un abrazo.

casss dijo...

El mismo olor a polvora y sin embargo... la alegría de reencontrarse con su tierra amada.
Un relato emocionante, que nos involucra a todos y toca las fibras más sensibles.

Un fuerte abrazo, para quien sabe muy bien la alegría de volver a su tierra.

besos!

Juan Carlos Celorio dijo...

Me ha gustado tu historia y me ha recordado la de mi abuelo. Se marchó de su pueblo valenciano, antes de la guerra, Madrid, Cuba y finalmente México. No volvió. Mi madre me contaba que cada vez que escuchaba el pasodoble Valencia lloraba de emoción.
Besos. Me gusta verte de nuevo cada semana.

Mar dijo...

Como había visto la instantánea del vídeo de las fallas, este comienzo me colocó en un lugar diferente. Buena la jugada... Totalmente descolocada luego, me voy a un escenario muy diferente, el de la guerra civil... Me ha gustado el paralelismo entre los dos ruidos y las asociaciones y contrates que conllevan. ¡Ay, Maru! El otro día en la manifestación de Barcelona, no sabía si eran petardos o cargas de los mossos lo que se escuchaba a una manzana de la Plaza Cataluña... De hecho eran las dos cosas... al poco empezaron las carreras. Tu relato me ha recordado eso.
Un abrazo

Matices dijo...

Que bonito enlazar tan diferentes momentos y que cierto es que no hay nada como sentirse en tierra propia... Imagino su emoción tras tus letras

Besos, Maru!!

Paulys dijo...

Hermoso. Cuanto veo de tu historia y la mia en tus palabras. Se siente en estas letras que vos sabes muy bien lo que es volver a casa. Aunque ahora es otro tiempo, que duro debe haber sido para aquellos emigrantes!!!

Ana Tapadas dijo...

Venho te deixar desejo de uma boa semana.

Beijo

María dijo...

Hola MARU cielo, llego tarde a las fiestas de tu pueblo y a este precioso relato tuyo... es que me quedé medio circunspecta al no saber nada de ti tras mandarte mis últimas noticias, en fin, no importa. En aquella ocasión te dejé en una entrada una margarita para ti que no se si viste (AQUÍ:-)... ahí sigue esperándote, al lado de mi cariño de siempre.

Ojalá estés pasando estos días feliz en compañía de tu familia.


Un beso muuuy grandísimo bonita.

Ana Tapadas dijo...

Feliz Páscoa, Maru!

Beijinho

Sindel Avefénix dijo...

Amiga me pidieron que elija a alguién para premiar, fuiste la primera que se me ocurrió, pasate por mi blog así sabés de que se trata.
Un abrazo enorme :)